En OpiniónyNoticias.com queremos celebrar la Navidad contando su historia.

La navidad es una festividad que, según Francisco José Gómez, va más allá de los buenos sentimientos, representa una de las manifestaciones religiosas, culturales y humanas más profundas de nuestra historia. A través de los siglos, este tiempo ha servido como un estímulo para alcanzar un mayor grado de humanidad, promoviendo valores fundamentales como la bondad, la caridad, la compasión y la transformación personal.

Uno de los puntos más debatidos son los detalles históricos del nacimiento. Pepe Rodríguez aclara que Jesús no nació en el año 1 de nuestra era, sino entre el 7 y el 6 a.C.. Sobre el lugar, Rodríguez sostiene que el sitio más probable fue Nazaret o Cafarnaún, indicando que la mención de Belén es una invención posterior para dar cumplimiento a profecías mesiánicas.

Respecto a la fecha, Francisco Gómez explica que la Iglesia buscó sustituir la fiesta pagana romana del "Nacimiento del Sol Invicto" por una solemnidad cristiana, aprovechando el simbolismo del solsticio de invierno. Por su parte, Pepe Rodríguez menciona que, antes de fijarse el 25 de diciembre, hubo propuestas tan variadas como el 20 de mayo o el 20 de abril, y destaca que el Papa Fabián llegó a calificar de "sacrílegos" a quienes intentaban determinar la fecha exacta. Además, Rodríguez señala que elementos icónicos como el buey y el asno son invenciones basadas en textos bíblicos mal traducidos o manipulados.

Tras siglos de devoción en Europa, la tradición llegó a Nueva York en 1621 con los colonos holandeses, quienes lo llamaban Sinterklaas.

• El horario y su significado simbólico: Se celebra tradicionalmente a la medianoche (entre el 24 y el 25 de diciembre), basándose en la creencia de que esa fue la hora exacta del nacimiento de Jesús. Históricamente, formaba parte de un ciclo de tres eucaristías: la primera (del Gallo) significaba el nacimiento sagrado, la segunda (al alba) anunciaba la felicidad que Cristo traía, y la tercera (de día) figuraba la realización de las promesas de la Ley Santa.

 

• Lecturas y proclamas solemnes: Durante esta noche, los monasterios y catedrales realzaban la ceremonia proclamando solemnemente los anuncios del profeta Isaías, las genealogías de Cristo, el prólogo del Evangelio de san Juan y, curiosamente, los textos de los oráculos sibilinos que hacían referencia al Mesías.

 

• La exclusividad del himno "Gloria": Uno de los momentos culminantes es el canto del Gloria in excelsis Deo. Es un elemento distintivo ya que, hasta el siglo VI, este himno estaba reservado exclusivamente para ser entonado en la Misa del Gallo.

 

• El "jolgorio" y elementos populares: A diferencia de otras misas solemnes, esta liturgia permitía una gran participación popular ruidosa. Los fieles acudían con instrumentos como flautas, tambores, castañuelas y panderos. Un elemento muy particular era la liberación de pajarillos capturados previamente para ser soltados durante el momento de la adoración del Niño.

 

• Representaciones teatrales (Officia): A partir del siglo X, se incorporaron pequeñas escenificaciones dentro de la misa para ayudar a los fieles a contemplar el misterio

. Estas incluían el anuncio de los ángeles a los pastores, la adoración de los Reyes Magos o la representación de la Sagrada Familia con personas y bebés vivos del lugar

 

• El ritual del beso y la adoración: Al finalizar la eucaristía, los fieles pasan a besar y adorar la imagen del Niño Jesús durmiente. Esta tradición evoca el milagro de Greccio de 1223, donde se dice que una imagen del Niño cobró vida en brazos de san Francisco de Asís.

El nombre de esta misa es en sí mismo un símbolo: así como el canto del gallo anuncia el inicio de un nuevo día, esta liturgia celebra el amanecer de una nueva humanidad tras la oscuridad del pecado.

El Espíritu de las Navidades Pasadas le muestra su infancia solitaria y cómo perdió al amor de su vida por su ambición. El Espíritu de la Navidad Presente le revela la alegría humilde de su empleado Bob Cratchit y la fragilidad del pequeño Tiny Tim. Finalmente, el Espíritu de las Navidades Aún Por Venir le muestra su propia tumba, abandonada y sin afecto. Aterrorizado, Scrooge despierta el día de Navidad convertido en un hombre nuevo: envía un pavo gigante a los Cratchit, ayuda a Tiny Tim y promete mantener el espíritu de la Navidad en su corazón todo el año. Esta historia nos emociona porque deseamos creer que el ser humano es capaz de cambiar y ser redimido

Fuentes: