En la actualidad muchos venezolanos han perdido la confianza, la confianza en sí mismos,

esto se debe en gran parte a la influencia que sobre ellos ejercen ciertos políticos de oficio con sus opiniones. Las personas que confían en sí mismos creen en sus habilidades, sienten que tienen control sobre sus vidas y creen que son capaces de hacer lo que planean y esperan.

Cuando hay confianza, las personas dan un paso al frente de manera voluntaria y trabajan de forma óptima, conjunta y eficiente, adoptan un propósito común, asumen riesgos, piensan de forma creativa, se ayudan mutuamente, y se comunican de manera abierta y sincera. La Venezuela actual requiere de ciudadanos que tengan criterio propio, que sean capaces  de formar una opinión o un juicio basado en la razón, la evidencia y los valores personales, que sean conscientes de sus propias limitaciones, prejuicios y emociones, y estén dispuesto a aprender, dialogar y cambiar de perspectiva cuando sea necesario. Para superar  la actual situación de calamidad en la cual se encuentra sumida Venezuela, se requiere  que sus ciudadanos  recuperen la confianza, que sean coherente entre lo que piensan, dices y sientes, y que sus acciones vayan en consecuencia, así estarían dando un paso importante para conquistar la confianza que se requiere para lograr superar esta actual situación. Cuando los ciudadanos logren alcanzar este objetivo, habrán logrado desprenderse,  entre otras muchas cosas,  de personajes maulas quienes se hacen llamar políticos.

Los venezolanos deben recuperar la confianza en sí mismo, y nunca abandonar la facultad de pensar para asumir la de obedecer.